El descalce organizacional es un fenómeno que se refiere a la falta de alineación o coherencia entre las diferentes áreas o unidades de una empresa. Esto puede ocurrir debido a diferencias en las metas, objetivos, enfoques, diagnósticos, procesos, sistemas de trabajo, desajustes por conocimientos y/o cambios en el mercado / industria. Cuando hay descalce organizacional, las diferentes unidades de la empresa pueden trabajar en contraposición entre sí, lo que puede llevar a conflictos, ineficiencias y una baja productividad (a nivel global, la productividad antes de la pandemia había caído ~6%).
Para evitar el descalce organizacional y mejorar la productividad, es importante que la empresa fomente la colaboración y la comunicación entre los diferentes departamentos. Esto puede lograrse a través de la implementación de estrategias como la integración de sistemas de información, la realización de sesiones de trabajo en conjunto y la promoción de la participación activa de todos los miembros de la empresa en la toma de decisiones.
Otro aspecto clave para evitar el descalce organizacional y mejorar la productividad es la definición clara de objetivos y metas. Todos los miembros de la empresa deben estar al tanto de los objetivos generales de la organización, así como de las metas específicas de cada unidad. De esta manera, cada unidad podrá trabajar de manera coordinada para alcanzar los objetivos comunes.
Además, es importante que la empresa promueva una cultura organizacional que fomente la adaptabilidad al cambio en un contexto post-pandémico de alta incertidumbre donde hemos pasado de un ambiente VUCA a uno BANI en menos de 5 años. En este entorno, cada vez más cambiante y competitivo, es fundamental que la empresa esté dispuesta a adaptarse a las necesidades del mercado y a las demandas de los cliente. Para ello, es necesario fomentar una cultura de colaboración y participación que permita a la empresa ser más ágil y responder de manera eficiente a los cambios.
Adicionalmente, tener un Análisis de Redes Organizacionales, tanto de las relaciones formales e informales al interior de la empresa, puede ayudar a ver con claridad, cómo colaboran y se comportan realmente los equipos en estos contextos de incertidumbre, fragilidad y alta volatilidad, permitiendo identificar mejor aquellos liderazgos que pueden impulsar la adaptación al cambio.
En resumen, la relación entre el descalce organizacional y la productividad es directa. Una empresa que sufre de descalce organizacional puede ver afectada su productividad debido a conflictos, ineficiencias y falta de coordinación entre las diferentes unidades. Para evitar el descalce organizacional y mejorar la productividad, es importante fomentar la colaboración y la comunicación, definir objetivos claros, y promover una cultura organizacional que favorezca la adaptabilidad y el cambio.
Comparto este interesante webinar organizado por ABRA donde Graciela Trincado, CEO de Codify explica la importancia de este fenómeno.
Gonzalo Ibarra es el socio fundador de GIA Consultores. De profesión Ingeniero Civil Industrial (USACH) y Magister en Desarrollo Organizacional (UDP), con más de 20 años de experiencia en procesos de transformación organizacional en toda Latinoamérica donde ha estado vinculado a proyectos de transformación digital y gestión del cambio de organizaciones público-privadas.